Noche «preocupante» en Berlanga: arden un centenar de pacas de paja junto a las casas
El alcalde reconoce que vivieron momentos de angustia porque «se producían unas llamas muy grandes» y «era complicado el poder apagarlas»
«Ha sido una noche bastante larga y preocupante». El alcalde de Berlanga del Bierzo, César Álvarez, evidencia el desasosiego de los vecinos ante el incendio por el que fue detenido un joven de 20 años como supuesto autor y que ha estado a la puerta de sus casas. Unas llamas que se lograron controlar pasadas las dos de la madrugada y que este viernes, 29 de agosto, ha quedado rebajado ya a nivel 0 de peligrosidad.
«Ahora la situación está controlada», indicó el regidor municipal que relata como vivieron momentos de angustia porque el fuego se hizo especialmente virulento al arder más de un centenar de pacas de paja seca que se encontraban almacenadas en el pueblo lo que complicó especialmente unas labores de extinción en las que se volcaron los vecinos.
«Se incendiaron ciento y pico rollos de hierba que estaban dentro del pueblo y se producían unas llamas muy grandes, entonces terminamos a las dos de la mañana, hubo que ir deshaciendo cada rollo para poder apagarlo, continuamente echando agua porque era complicado el poder apagarlos», relata César Álvarez.
Los servicios de extinción se afanaban en la mañana de este viernes, 29 de agosto, en abrir cortafuegos en la parte baja del pueblo para salvaguardar las casas del fuego y garantizar la seguridad en el caso de que volviera a producirse otro incendio. También las brigadas de extinción «han estado refrescando el terreno porque había algún amago de incendio otra vez».
Unas labores en las que «el tiempo también nos está ayudando porque refrescó esto bastante y llovió un poco entonces digamos que ahora en estos momentos la cosa está más tranquila», remarcó el alcalde de Berlanga.
«Los vecinos se volcaron»
Los vecinos de Berlanga del Bierzo se volcaron para sofocar las llamas y evitar por todos los medios que llegaran a sus casas. «Aquí participó todo el mundo, los vecinos se volcaron, personal del Ayuntamiento y luego los profesionales de extinción del fuego», señala el primer edil. «Tengo que decir que todo muy bien», remarcó.
Reconoce César Álvarez que el hecho de que el fuego esté ya controlado ha devuelto la tranquilidad a los habitantes del pueblo aunque aún se mantienen en alerta. «La gente está más tranquila pero bueno, siempre con la alerta presente». Una cierta normalidad a la que también ayuda la presencia de un camión de extinción de incendios que se mantiene de guardia en el pueblo. «Eso da cierta tranquilidad», dice el alcalde. También el hecho de que ya «no hay llamas en el pueblo».