José Ramón Casal, jefe de Urgencias del Hospital del Bierzo

«A las cinco de la mañana Urgencias parecía el metro en hora punta»

Una situación que obligó en su momento a la Gerencia de Asistencia Sanitaria del Bierzo (Gasbi) a reestructurar los servicios que asumen la mayor carga de enfermos como es el caso de Medicina Interna y Neumología, trasladando las camas de Obstetricia a Pediatría y las de Ginecología a Cirugía General.

En la mañana de este lunes eran un total de 30 pacientes los que aguardaban en Urgencias su ingreso en planta en el primer centro sanitario de la comarca. Todo ello consecuencia de un agitado fin de semana en el que se registró un incremento especial en el número de enfermos atendidos en el servicio, llegando a las 160 asistencias frente a las 130 de un periodo normal, aunque lejos ya de las 213 que se registraron a comienzos de mes con el punto álgido de la oleada de gripe A y procesos respiratorios.

El acúmulo de pacientes del fin de semana se dejará sentir todavía especialmente hasta este martes, considera el jefe de Urgencias, a pesar de que la situación «ha mejorado un poco», si bien «no da tiempo a drenar los servicios de Urgencias porque todavía hay niveles altos de gripe aunque estamos bajando la curva», remarcó.

Casal destaca el pico asistencial que se vivió en Urgencias en la guardia de este domingo que «fue mala, muy mala de gente con gripe A y algo de Covid», en ocasiones con pacientes «que se van de planta un poco justos porque hay que drenar los servicios de Urgencias y a veces vuelven».

El jefe del servicio rechaza hablar, no obstante, de colapso «porque nosotros nunca nos colapsamos», teniendo en cuenta que «siempre hay pasillos, consultas y áreas de expansión, pero sí seguimos tensionados, muy tensionados, aunque bajando un poco». Una situación que entiende que no se normalizará «hasta finales de mes».