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Piden 7 años de cárcel para el expropietario de un bar por tráfico de drogasNecesitas ser registrado para acceder a esta funcionalidad.
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La Audiencia Provincial de León juzga el próximo jueves 17 de octubre, a las 10.00 horas, al antiguo propietario del bar Tándem de la capital berciana para el que la Fiscalía de Área de Ponferrada pide una pena de 7 años de cárcel y 3.900 euros de multa por un delito de tráfico de drogas con el agravante de utilizar un establecimiento abierto al público.
Los hechos se remontan al año 2019 cuando tras las investigaciones seguidas por el Grupo de estupefacientes de la Brigada Local de la Policía Judicial de Ponferrada se tuvo conocimiento, a través de las quejas vecinales, notas internas de patrullas y vigilancias realizadas que se venía traficando con sustancias estupefacientes en el local.
El día 4 de diciembre de 2019 la Policía realizó una inspección del mismo e identificó al acusado detrás de la barra y a un cliente, que portaba en su bolsillo un envoltorio blanco que contenía en su interior cocaína, manifestando que lo acababa de adquirir, sin querer precisar a quien ni dónde.
Durante la inspección, los agentes intervinieron encima de la mesa de la cocina un envoltorio de plástico abierto y dispuesto para su uso, en cuyo interior se halló una sustancia que alcanzó un peso neto de 5,19 gramos y tras los pertinentes análisis resultó ser cocaína con una riqueza de 89,69%. Al lado se incautó una balanza de precisión y una bolsa de plástico con recortes circulares, habitualmente usadas para la confección de papelinas, según recoge el escrito de calificación de la Fiscalía.
Junto al frigorífico la Policía halló una caja de cartón en cuyo interior se localizó un bote de cristal conteniendo los envoltorios con diversas pastillas, setas y un sello de lo que parecía LSD. Las pastillas intervenidas alcanzaron un peso neto total de 5,09 gramos y tras los pertinentes análisis resultó ser MDMA. Las setas intervenidas y lo que parecía un sello de LSD, tras practicarse los análisis pertinentes, no dieron positivo a sustancia psicotrópica ni estupefaciente.
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Además, en el interior del congelador se halló una caja de plástico que contenía en su interior 8,22 gramos de una sustancia blanca que tras practicarse los análisis pertinentes resultó ser anfetamina.
Las sustancias pertenecían al acusado quien las tenía en su poder para distribuirlsa en el establecimiento que regentaba entre terceras personas y su valor total en el mercado ilícito ha sido fijado en 1.692,11 euros. Además, en el momento de la inspección se le intervino 955 euros en billetes y 255 euros en la caja registradora.
La totalidad de los efectos intervenidos eran utilizados para facilitar la distribución de las sustancias estupefacientes y se habían adquirido como consecuencia de las ganancias obtenidas por la venta de sustancias estupefacientes, así como el dinero que también procedía de las ganancias obtenidas por la venta de sustancias estupefacientes, según la Fiscalía.
El acusado, que estuvo privado de libertad por esta causa un día, se aprovechaba y beneficiaba en el ejercicio de su actividad ilícita (tráfico de estupefacientes) del bar que regentaba, favoreciendo que los intercambios de sustancias estupefacientes se realizaran bajo la apariencia de una normal explotación del negocio.
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