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Los comerciantes del centro de Ponferrada consideran que la Zona de Bajas Emisiones (ZBE) que se prevé implantar en la capital berciana a partir del 2024 solo servirá para «asfixiar» sus negocios, ya de por si perjudicados por dos crisis.
En ese sentido, Felipe Álvarez, presidente de Templarium, señaló ya con un casco antiguo peatonalizado sería suficiente «para cumplir la normativa» pero que con la ZBE y de la manera que está estructurada Ponferrada «no tiene sentido», sobre todo para ciudades del tamaño de la capital berciana. «Es un absurdo que se agarren a normas absurdas», indicó.
Es más, Álvarez destacó que en otras ciudades en las que se ha implantado la Zona de Bajas Emisiones, los tribunales han ordenado retirarlas, como es el caso de Gijón, ya que se cierra a los comercios, peatonalizando calles y «sin contemplar ningún aparcamiento más de lo que tenemos».
En la actualidad, sin implantarse todavía la ZBE, los comerciantes del centro de Ponferrada ya están en una «situación muy complicada» debido a la cantidad de obras que hacen imposible circular con normalidad por la ciudad. Y es que lo que no llegan a entender es el motivo de que «de repente se haya abierto todo a la vez».
Por todo ello, pedirán al alcalde una reunión para que los comerciantes puedan expresar sus dudas y quejas con respecto a las obras y a la ZBE.
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