El Bierzo a oscuras: el día que volvimos a comer de lata

Ponferrada y El Bierzo van recuperando poco a poco la normalidad tras el gran apagón de este lunes, 28 de abril, aunque todavía siguen los problemas de comunicaciones en los pueblos del Bierzo Oeste y las incidencias se han dejado sentir también en las consultas del Hospital del Bierzo ante la dificultad para acceder a los historiales clínicos.

Eran las 12:35 horas del mediodía cuando la oscuridad llegaba. Parecía que era solo un corte más de luz pero la cosa se empezó a poner fea cuando las primeras noticias que conseguían llegar por Whatsapp hablaban de un problema generalizado en toda España que afectaba también a Portugal.

Instantes después los móviles enmudecieron. Internet también dejó de funcionar. Y llegó el aislamiento. La actividad se paralizó en el Ayuntamiento, negocios y empresas, como en un castillo de naipes que se desploma, en una situación inédita que comenzó a generar el desconcierto entre los ciudadanos que veían incrédulos los semáforos dejaban de funcionar.

La gente se echaba a la calle en una aparente tranquilidad pero el apagón comenzaba a copar toda las conversaciones. Las máquinas de café de los bares dejaban de funcionar y a oscuras, solo iluminados por la luz del día, algunas personas salían a la puerta a comentar lo sucedido y se afanaban por encontrar una explicación.

Era la hora de comer y sin luz en las casas hubo vecinos y vecinas que optaron por echarse a las tiendas para proveerse. El pan era de lo más buscado y también las conservas. Una escena que se repetía también en algunos supermercados que abastecidos por generadores pudieron mantener sus puertas abiertas. Es el caso del Mercadona situado en el Parque de la Herrería donde a mediodía continuaba con su actividad aunque había productos a los que los clientes no tenían acceso y algunas cámaras aparecían cerradas, como es el caso de las que contenían productos lácteos. Donde se notaban más clientes era en el comida preparada y lista para llevar a casa. Había que salvar al menos la comida de mediodía a la espera de que la situación se solucionara.

Los Bomberos de Ponferrada atendieron durante la jornada 33 rescates en ascensores, cuatro aperturas de puertas en locales comerciales y varias ayudas domiciliarias. Además, los pasajeros de un tren parado en Bembibre fueron evacuados por ambulancias y patrullas de seguridad ciudadana.

El apagón bloqueó la actividad en los juzgados de Ponferrada, no así en el Hospital del Bierzo que logró mantener UCI, quirófanos, banco de sangre, farmacia y laboratorios gracias al grupo electrógeno «que garantiza el suministro para varios días su fuera necesario», señalaron fuentes del primer centro sanitario de la comarca. Además, se apagaron todas las luces, ordenadores y pantallas que no fueran estrictamente necesarias tanto en el hospital como en los centros de salud para saturar lo mínimo posible el generador.

«Existe una coordinación de los recursos entre las administraciones y la asistencia sanitaria está garantizada», remarcaron desde el Hospital del Bierzo, desde donde enviaron un mensaje de tranquilidad a la población para que utilice de manera razonable los servicios de emergencias. Además, existe una coordinación de los recursos entre las administraciones. «Estamos en constante comunicación y se ha formado un comité de trabajo entre instituciones», insistieron.

De esta forma, las consultas no se tuvieron que suspender y en cuanto a las operaciones se han finalizado las que se estaban llevando a cabo y se han aplazado aquellas intervenciones que no son urgentes.

El Ayuntamiento de Ponferrada, por su parte, reunió a las 14:00 horas a su Comité de Emergencia para coordinar y garantizar el funcionamiento de servicios básicos. En este sentido, el alcalde, Marco Morala, lanzó un mensaje de tranquilidad a los vecinos.

Pasadas las 15:30 horas, poco más de tres horas después, algunos domicilios comenzaban a recuperar el servicio eléctrico. Y así poco a poco y de forma progresiva en los diferentes barrios de la ciudad. Un momento que muchos aprovecharon para llenar de combustible los depósitos de sus vehículos. Una estampa que se hacía visible en gasolineras como la ubicada en la avenida de la Libertad, junto a la estación de autobuses, donde había colas esperando a que les tocara el turno para repostar. «He entrado de turno a las cuatro de la tarde y así estamos, sin parar», relataba una de las empleadas.

Por lo que respecta al transporte, tanto en la estación de autobuses como en la de Adif hacia las 17:30 horas se respiraba cierta tranquilidad aunque sí que el personal de información resaltaba en el caso de la de trenes que eran muchas los personas que estaban solicitando información sobre qué iba a pasar con los viajes que tenían previstos ante los datos que les comenzaban a llegar y que les dejaban un tanto desconcertados.

A las 19:15 horas un nuevo apagón sobresaltó a la capital berciana. Un corte que se prolongó durante cerca de media hora. Aunque la luz se recuperó sobre las 19:45 horas, la ciudad volvía a quedarse incomunicada sin líneas de teléfono y sin internet en un día de sobresaltos.

Sí que hubo algunos barrios de la capital berciana en los que el nuevo apagón se prolongó hasta cerca de las 4 de la madrugada tanto en viviendas como en las calles, según informó el Ayuntamiento.

Tanto la Policía Municipal como Nacional redoblaron esfuerzos y efectivos durante toda la noche para garantizar la seguridad con rondas periódicas en los centros sanitarios e incrementando la vigilancia con un mayor número de efectivos, cinco patrullas y dos mandos por parte de la Policía Local y 10 patrullas en el caso de la Nacional. Una noche que finalmente se saldó sin incidentes y que iba a dar paso al día después del gran apagón.

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