El Bembibre HC viaja a Cataluña para enfrentarse al Martinelia Manlleu

Después de ver los dos partidos disputados por el Bembibre HC, se crea la ilusión de que lo bueno está por llegar y hay que tener paciencia. El Manlleu cuenta con jugadoras contrastadas y con jóvenes promesas del deporte, igual que las del Bierzo Alto. No obstante, se juega en su pista y ante su público, pero no hay temor, nada que perder y mucho que ganar.

En el momento que las jugadoras de Carlos Figueroa, rompan con su complejo de equipo novato y den rienda suelta a su juego, se verá otra cara en el juego. Ya mostraron esa manera jugar pero a cuentagotas en Gijón y en Bembibre, ahora toca soltar el lastre de los nervios y saber que están en la mejor liga del mundo y que han llegado por méritos propios.

El entrenador del Bembibre Hockey Club Hocke, Carlos Figueroa, considera que el choque contra el tercer clasificado de la temporada anterior y en su pista «es más complicado» y tiene claro que «debemos aclimatarnos a su pista». Además, es consciente de que el conjunto catalán «tienen buenas jugadoras, de muchísimo nivel y que han sido seleccionadas para la selección española».

Así considera que las del Bierzo Alto se va a encontrar un equipo que no tiene el juego del Telecable ni las individualidades del Palau. «El Manlleu tiene un juego muy homogéneo, con jugadoras grandes y físicas, muy parecidas en ese aspecto al Palau, con tres jugadoras que destacan técnicamente. Como equipo tiene sus fallos también y sus puntos débiles pero son muy competitivas y habrá que hacer las cosas bien y si logramos al menos un punto sería genial, pero no será fácil mantener nuestra portería a cero».

Por todo ello les ha trasladado a sus jugadoras la necesidad de que «compitan» y de que «seamos capaces de ponerlas en apuros». «Debemos ser muy conscientes de que hay dos ligas y a nosotras nos ha tocado lidiar con los seis primeros en las primeras siete jornadas. Tenemos que coger la suficiente experiencia para afrontar el segundo tramo liguero rindiendo mucho más».

Figueroa entience que el hockey femenino se ha ido más a la presión al rival, sobre todo los equipos punteros a sabiendas de que los equipos más flojos y con problemas de posesión, tienen problemas para salir jugando. «Esa presión es de los problemas más difíciles de solventar y se hace con buena técnica individual y buena táctica de conjunto», señaló. «Si tuviéramos buena posesión de la bola, tendríamos oportunidades de gol. El gran problema que tengo ahora es convencer a las jugadoras que para mantener la posesión, deben mantenerla en equipo. Hay que solucionar ese punto y enseñar a las jugadoras qué pueden hacer y qué no, y si tenemos más posesión daremos un paso adelante para competir con más calidad», remarcó.

El míster es consciente de que «saldremos con pocos puntos al principio de temporada pero seguro que iremos cada vez a más». «Hay que tener paciencia y pedirla también a mis jugadoras, hemos hecho dos buenos partidos con resultados digamos buenos, pero no hemos sacado nada positivo y hay que conseguir que la gente no se desmoralice. Estamos en la mejor liga del mundo y somos uno de los catorce mejores equipos del mundo en este momento», concluyó.