La Junta valora levantar de cero el edificio que llevaba dos años cerrado por impagos
La reconstrucción de la infraestructura incorporará reformas proyectadas antes del incendio
El incendio declarado en Yeres el pasado 25 de agosto obligó a la Junta de Castilla y León a declarar de emergencia la reconstrucción del Aula Arqueológica y del Mirador de Orellán, dos infraestructuras dañadas en el Espacio Patrimonio de la Humanidad de Las Médulas. Con un presupuesto de 2,4 millones de euros, el Ejecutivo autonómico busca reparar los efectos del fuego e incorporar al mismo tiempo mejoras de accesibilidad y modernización técnica que ya estaban proyectadas antes de la tragedia.
El proyecto llega tras un periodo complicado para este centro, ya que lleva más de un año cerrado por problemas de gestión vinculados al impago a los trabajadores. Ahora, además de afrontar la reparación de los daños materiales, entre ellos la cubierta, que quedó completamente quemada según confirmó el Servicio Territorial de Cultura de León, la Junta estudia si será necesario levantar el edificio desde cero como medida técnica para garantizar la seguridad.
Fuentes autonómicas señalan que la reconstrucción permitirá integrar también un proyecto de reforma por accesibilidad y modernización técnica que se encontraba en fase de estudio. Sin embargo, desde la Junta matizan que esa iniciativa previa no tiene relación directa con la intervención que ahora se considera imprescindible, promovida exclusivamente por las consecuencias causadas por el incendio.
La recuperación del Aula Arqueológica y del Mirador de Orellán forma parte del Plan de Recuperación de Las Médulas, elaborado tras el incendio y coordinado a través del Equipo Técnico Interinstitucional de Recuperación (ETIR). Este órgano reúne a la Junta de Castilla y León, la Diputación de León, el Consejo Comarcal del Bierzo, los ayuntamientos de Carucedo, Borrenes y Puente de Domingo Flórez, además del CSIC, la UNESCO, ICOMOS, el Ministerio de Cultura y colegios profesionales, con el fin de garantizar una actuación coordinada y sin duplicidades.
El plan incluye también la restauración forestal, la limpieza de las áreas quemadas, la recuperación de sendas y señalización, y una línea de ayudas directas a los ayuntamientos afectados.
Comienzan las labores de desescombro
Según confirman vecinos e Médulas, los trabajos de desescombro ya han comenzado y la mayoría del pueblo ha optado por delegar en la Junta las obras, una de las dos vías que presentó el Ejecutivo junto con la posibilidad de que cada vecino reconstruyera su vivienda y presentara los documentos pertinentes para el abono de los costes.
No obstante, Mónica Pérez, vecina de Médulas, incide en que estas medidas son «todas de palabra» y que, hasta ahora, no han recibido ningún documento formal que explique todo el proceso.