Forestalia no tiene aún «ninguna previsión» para arrancar la planta de Cubillos

La planta de generación eléctrica mediante biomasa de Forestalia ubicada en Cubillos del Sil seguirá parada. De momento la compañía no tiene fecha para arrancar las instalaciones que entraron en parada técnica a finales del pasado mes de julio.

La compañía justificó el cese temporal de la actividad en las instalaciones en la necesidad de acompasar la actividad de la planta al ritmo de cobro de las compensaciones económicas del Gobierno previstas en la orden ministerial vigente y en los ajustes en el suministro de biomasa agroforestal.

Así las cosas, de momento «no hay ninguna previsión de retomar la actividad», según explicaron fuentes de la compañía. A falta de actividad, en la planta berciana de Forestalia se mantienen las labores de vigilancia y mantenimiento. Unas tareas en las que Forestalia y Acciona, que se encarga del mantenimiento, han reorganizad a los 40 trabajadores para evitar que el parón no tenga efectos a nivel laboral.

Los socios de la misma, Forestalia y las entidades públicas de la Junta de Castilla y León, Somacyl y Sodiar, anunciaron durante su entrada en parada técnica su intención de trabajar intensamente para poder reanudar la actividad normal de la planta en el plazo más breve posible.

Las instalaciones, cuya potencia eléctrica instalada es de 49,5 megavatios (MWe), entraron en funcionamiento hace cuatro años con una inversión de 100 millones de euros. En 2023 finalizaron con éxito su tercer año de actividad en El Bierzo con una producción anual suficiente para abastecer de electricidad a unos 100.000 hogares. La planta había ampliado sus horas de funcionamiento a las 7.500 al año y necesitaba en torno a 350.000 toneladas de biomasa anuales para su producción eléctrica limpia.

La parada técnica de la actividad en la planta de Forestalia de Cubillos del Sil ha despertado las crítias de los ecologistas. Bierzo Aire Limpio considera que la parada de producción de la central de biomasa cuestiona su viabilidad sin fondos públicos. Es más, cree que se trata de una estrategia de la compañía para presionar al Gobierno a aplicar un incremento en las ayudas que recibe.

«Después de escasamente tres años de funcionamiento, Forestalia hace un alto en la producción, con lo que no sólo presiona para que la subvención del Estado pase de 58 euros a 70 euros por tonelada de biomasa, sino que evidencia un grave error de cálculo de los costes y un ineficaz análisis de viabilidad con el que fue dado de paso un proyecto sin las suficientes garantías», lamentaron.

Por su parte, la Junta de Castilla y León ha exigido al Gobierno que pague a la empresa Forestalia el dinero que le debe por el mecanismo de compensación pactado y que ha provocado que la central de biomasa de Cubillos del Sil haya decidido apagar sus calderas.

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