

Lo que quizás no sabes del zumo de fruta envasado
La legislación actual no autoriza la adición de azúcares, sólo se trata de fruta que se exprime y se envasa

Uno de los principales mitos que giran en torno al zumo de fruta envasado es que contiene azúcares añadidos pero lo cierto es que la legislación actual no autoriza su adición, sólo se trata de fruta que se exprime y se envasa. En concreto, así lo determina la directiva 2012/12/UE del Parlamento Europeo y del Consejo y su trasposición a la legislación española mediante el Real Decreto 781/2013 del 11 de octubre.
De hecho, el único proceso al que se somete el zumo envasado es la pasteurización, que garantiza la seguridad alimentaria y asegura que el producto envasado se altere lo menos posible y mantenga la mayor parte de sus propiedades nutritivas y organolépticas.
Normalmente se tiende a llamar zumo a todo, y no se diferencian las tres categorías que legalmente se pueden encontrar en el supermercado: zumo de fruta, zumo de fruta a partir de concentrado y néctar de frutas (el único que legalmente puede contener azúcares o edulcorantes añadidos).
¿Qué te aporta el zumo de fruta?

Tabla de composición de alimentos (Moreiras y col. Ediciones Pirámide, 2018)
Mantener una dieta equilibrada y realizar actividad física frecuente son factores clave a la hora de llevar una vida saludable. El consumo de frutas y verduras es, de hecho, muy importante y España es un país de gran tradición hortofrutícola en el que tenemos, durante todo el año, acceso a frutas y verduras de gran calidad. Pese a esto, la mayoría de consumidores no cumplen las recomendaciones de consumo diario de cinco raciones de frutas y hortalizas.
El zumo de fruta no sustituye a la fruta. No obstante, el Comité Científico de la Asociación 5 al Día reconoce que una de las cinco raciones diarias puede proceder del zumo de fruta envasado, siempre y cuando se incluya en el ámbito de un estilo de vida saludable.

Un vaso de zumo de fruta aporta numerosos nutrientes y vitaminas como: hesperidina, vitamina C, potasio y folato. En el caso del zumo de naranja, un vaso pequeño (150 ml) te proporciona el 45% de la vitamina C diaria requerida y un 10% del potasio. Además, contiene vitamina A y B9 (ácido fólico) y es fuente de hidratación ya que contiene un 90% de agua.
En cuanto a los azúcares, se trata de hidratos de carbono sencillos que encontramos en los zumos y que varían según la fruta de la que procedan. En el caso de un vaso del zumo de naranja de 150 ml predomina la sacarosa, seguida de la fructosa y la glucosa y tiene un Índice Glucémico de 50 que se considera bajo, al igual que su Carga Glucémica que es de 7,2.
Más información en: asozumos.org
Cinco claves
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Azúcares añadidos
La ley no autoriza la adición de azúcares añadidos al zumo de fruta envasado. Sus minerales, vitaminas y azúcares provienen naturalmente de la fruta de la que proceden. -
Origen natural
Su contenido es 100% fruta exprimida. -
Máxima sencillez
La fruta se exprime, se pasteuriza y se envasa. Nada más. -
Seguridad alimentaria
La pasteurización garantiza la seguridad alimentaria y las propiedades nutritivas de la fruta de la que procede apenas se ven alteradas. -
Raciones diarias
El Comité Científico de la Asociación 5 al Día reconoce que una de las cinco raciones diarias recomendadas puede proceder del zumo de fruta envasado (150 ml).