Drones, helicópteros y láser para cuidar de los bosques
La apertura de corredores de seguridad bajo de las redes eléctricas actúa como cortafuegos
Con la llegada del verano cualquier precaución es poca para cuidar de nuestros bosques. En épocas de riesgo de incendio es importante extremar medidas como no arrojar cigarrillos ni encender fuego en el monte, cumplir con las restricciones de acceso a zonas forestales, no utilizar herramientas que puedan generar chispas y tampoco depositar basuras fuera de los contenedores habilitados. La conservación del medio ambiente es responsabilidad de todos, también de las grandes compañías que creen que es compatible desarrollar su actividad preservando el entorno.
La importancia de controlar la masa forestal
Tala, poda y limpieza. Del total de 316.500 kilómetros de red eléctrica que integran la infraestructura de Endesa, parte corresponde a líneas que atraviesan zonas forestales y que precisan de una adecuada conservación. Cuidar de la masa vegetal favorece la apertura de corredores de seguridad debajo de las redes que actúan como cortafuegos; una tarea de prevención sobre el terreno que minimiza el riesgo de incendio y para la que se han invertido 21,7 millones de euros este año. Las labores se realizan siguiendo la normativa nacional y autonómica que marca el momento en el que deben realizarse las labores de tala y poda en función del calendario de crecimiento de las diferentes especies.
Además de los trabajos forestales, Endesa ha puesto en marcha un proyecto piloto para controlar el crecimiento de las plantas que crecen bajo las torres eléctricas. La subestación Congost de Manresa, en la comarca del Bages (Barcelona), se ha convertido en un laboratorio donde experimentar con unas enzimas naturales que facilitan la compactación de los primeros centímetros de suelo, disminuyen la absorción de agua y reducen la vegetación. Un tratamiento totalmente inocuo para el medio ambiente ya que, en caso de desuso de los soportes eléctricos, la vegetación puede volver a crecer simplemente oxigenando y arando la tierra.
Helicópteros para vigilar el cableado
Endesa ensaya el uso de encimas naturales para controlar el crecimiento de la vegetación bajo las torres eléctricas
Asegurar la continuidad y seguridad del suministro eléctrico durante el verano es otro de los objetivos de la campaña estival de Endesa. Durante el año la compañía ha destinado do 50,1 millones a labores de mantenimiento y mejora de la red una labor en la que se incorporan los últimos avances para inspeccionar las instalaciones y evitar incidencias, mejorando así la calidad de una red de distribución que llega a 12 millones de clientes en 27 provincias españolas de 10 comunidades autónomas. Cámaras de infrarrojos, sensores láser, además de helicópteros y drones que captan imágenes de alta calidad de las líneas eléctricas y del resto de instalaciones para detectar cualquier anomalía.
Solo por aire se superan los obstáculos que presenta el relieve del terreno y se acortan los tiempos para revisar los 6.900 kilómetros de circuitos de alta tensión previstos para este año. Los helicópteros sobrevuelan todo el tendido equipados con cámaras que permiten realizar termografías: las cámaras de infrarrojos detectan si algún elemento presenta una temperatura más elevada de lo normal y, por tanto, una anomalía que necesita ser corregida.
También es posible realizar mapas tridimensionales de alta resolución y cartografiar las líneas eléctricas gracias a la tecnología LIDAR (Light Detection and Ranging) de detección por luz y distancia. El sistema GPS se combina con sensores láser y permite planificar también las labores de limpieza forestal.