Un paseo por el primer parque musical de la provincia de León
El etnomusicólogo Maikel Barreira es el artífice de este espacio que tendrá instrumentos musicales hechos con frutas, maderas y huevos de gallina
Álvaro Pérez
Ocero
Viernes, 8 de agosto 2025, 08:28
Música con frutas, maderas y huevos de gallina será posible en el primer parque musical de la provincia de León. De la mano de dos proyectos como Binatur y Mirada circular, nace el primer parque musical de la provincia. Este nuevo rincón para la música y el disfrute de todos los sentidos surge en Ocero, localidad perteneciente al municipio de Sancedo, en la comarca de El Bierzo, gracias a la pasión y a la iniciativa de personas como Maikel Barreira. En este lugar, primará la música y los instrumentos artesanales fabricados en su totalidad con elementos naturales como frutas, maderas procedentes de árboles de diferentes especies o materiales obtenidos de animales como pieles, o incluso huevos de gallina.
Este parque será un recorrido para todos los públicos donde el objetivo, según aseguraba Maikel Barreira a este medio, es que cualquier persona, con más o menos conocimiento musical pueda ejecutar y aprender a tocar alguno de los instrumentos. Para ello, añade el precursor de la idea, el parque estará dividido en varias partes, según los instrumentos y la dificultad de los mismos. Esto permitirá que todo el mundo tenga su hueco y pueda disfrutar y aprender de la música rodeado de elementos naturales.
Además, muchos de los instrumentos artesanales tendrán una base similar o parecida a otros, pero el objetivo es elaborar instrumentos nuevos, «siempre intentando no manipular la naturaleza de forma agresiva».
La idea y el respaldo económico viene de dos iniciativas anteriores en las que priman también la naturaleza como es Binatur y Mirada circular. Al existir un promoción de estas actividades dentro del sistema educativo, Maikel Barreira explica que «el objetivo es aprovechar la cantidad de niños que vienen de toda la península para que tengan un recorrido donde haya instrumentos musicales creados de forma artesanal». La seña de identidad de este pequeño lugar musical es aprovechar todos los recursos de la naturaleza, desde el agua, hasta la vegetación.
Dentro de este museo abierto al aire, habrá instrumentos de viento, de cuerda, de teclas y de percusión. El parque se realizará dentro de las instalaciones de Binatur, un entorno con mucha arboleda, multitud de árboles frutales y según Barreira, «un lugar ideal».
Un proceso lento, pero en constante evolución
El proyecto se llevará a cabo poco a poco, debido a que, según explica el protagonista, «es un proceso muy costoso que lleva tiempo, desde las semillas que se plantan, hasta el primer sonido que emite el instrumento». No obstante, el etnomusicólogo asegura que cuenta con algo de ventaja al tener calabazas y materiales de años atrás con el que ha comenzado el trabajo.
«Podemos comprar las cosas, pero para nosotros no tiene sentido»
Maikel Barreira
Impulsor del parque musical
Se espera un invierno de trabajo para intentar abrir las puertas del parque en la primavera del próximo año. El protagonista defiende la esencia de este proyecto y explica que «podemos comprar las cosas, pero para nosotros no tiene sentido». Respecto a los materiales, desde el equipo que realizará el proyecto buscan «elementos naturales que se adopten bien y sean capaces de aguantar tanto las temperaturas altas, como las muy bajas», ya que también ha añadido, «en El Bierzo contamos con inviernos muy fríos pero también los veranos muy calurosos». Maikel Barreira también menciona a Guillermo Muelas, un ingeniero y gran amigo que les ayudará en la construcción de determinadas cosas y espacios para el parque. «Nosotros tenemos una idea y mucha experiencia en el trabajo musical, pero la música también es matemática».
Un etnomusicólogo dedicado a la creación de instrumentos nuevo
Maikel Barreira, además de etnomusicólogo, desempeña la profesión de Luthier. Lleva más de 15 años realizando réplicas de instrumentos ya inventados, pero también se dedica a darle nueva forma a otro tipo de instrumentos nuevos con materiales sacados de la naturaleza. Las calabazas serán las principales protagonistas ya que forman parte de la base principal de la mayoría de estos instrumentos.
«Inventar instrumentos nuevos lleva un poco más de trabajo y un poco más de experimentación«. Para ello, se requieren muchas pruebas tanto en la propia elaboración como también en el sonido del mismo, asegura comparando la dificultad de la práctica de replicar de replicar instrumentos frente a la de inventarlos.
Cultiva más de 100 especies distintas de calabazas
La materia prima principal utilizada en la mayor parte de los instrumentos que elabora es la calabaza, ya que lleva alrededor de 15 años cultivando entre 100 y 120 especies de calabazas distintas en zonas de Fabero y Ocero. Maikel Barreira explica a este medio que el proceso es muy lento, ya que además del cultivo, posteriormente es necesario realizar el secado y curado de cada pieza. Por ello, hace hincapié en que la paciencia es una de las principales cualidades para esta labor. El autocultivo les permite obtener la materia prima con la que van a trabajar, sin tener que comprarla ni conseguirla de otra forma.
Por otro lado, algo esencial para los propulsores de este proyecto es ser conocedores en todo momento de la procedencia real las semillas de las calabazas que cultivan, «por ello nos gusta mucho hacer los cultivos de generación en generación porque así siempre vamos a saber que la calabaza ni ha tenido ni ha sufrido ningún elemento externo».