Un año de cirugía robótica en El Bierzo: 58 operaciones, el 89% de Urología
«Es un gran puntal para el área sanitaria, porque estamos a nivel de hospitales mucho más grandes y dotados», destaca el coordinador del Da Vinci en la Gasbi
La cirugía robótica se consolida en El Bierzo en puertas de cumplirse su primer año de andadura en la sanidad de la comarca.
El robot Da Vinci se instaló el 4 de diciembre de 2024 en el Hospital Universitario de la comarca tras una inversión de 1,63 millones de euros financiados con el Fondo Europeo de Desarrollo Regional (Feder). Desde esa fecha ha permitido realizar un total de 58 intervenciones en el área sanitaria mejorando los resultados, la precisión y la seguridad con una actividad mínimamente invasiva para el paciente. El 89% de las operaciones con el Da Vinci se han llevado a cabo en la especialidad de Urología, aunque también se ha utilizado en varios casos de Cirugía General.
La primera operación utilizando el Da Vinci fue una neoplasia de colon. La intervención transcurrió sin incidencias, con un desarrollo técnico fluido y un resultado quirúrgico muy satisfactorio. Duró aproximadamente tres horas y el postoperatorio fue también favorable, por lo que el paciente fue dado de alta a los cuatro días, cumpliendo así con los objetivos de recuperación precoz que permite esta tecnología.
El jefe del servicio de Urología del Hospital del Bierzo y coordinador del robot en la Gasbi, Óscar Miranda, llevaba haciendo intervenciones de consola desde el año 2021, lo que permitió al primer centro sanitario de la comarca «entrar muy rápido a la cirugía robótica, acreditar a otro cirujano más y ahora se acreditará a un tercero urólogo, con lo cual la disponibilidad que tenemos de cirujanos acreditados para la cirugía robótica es mayor», explica.
La cirugía reconstructiva urológica «se beneficia mucho de la robótica» por lo que «en Urología se usa mucho el robot». La siguiente especialidad en acreditarse fue Cirugía General «y cuando ya esté su curva, se planteará a otros servicios entrar en la cirugía robótica», avanza Miranda. La idea es extenderlo a Ginecología y Otorrinolaringología, donde «son casos más concretos y más seleccionados, entonces se ven muchos menos», apunta.
De cara a los pacientes, en la especialidad de Urología la cirugía robótica se traduce en mejores resultados de incontinencia precoz, mejor tasa de potencia sexual y en la reducción de la estancia postoperatoria. Son pacientes que «en algunos casos después de 24 horas de una cirugía mayor se van a su casa», destaca el jefe del servicio.
Una cirugía «más agradecida»
Para los especialistas se trata de una cirugía que «es más agradecida porque el postoperatorio suele ser mejor y con menos complicaciones», por ejemplo «en intervenciones de prostactetomía radical muchas veces tenemos al paciente ingresado 24 horas, un día después de una cirugía mayor se va para su casa y hace unos años era impensable», remarca Miranda.
Todos los días no hay cirugía robótica en el Hospital del Bierzo y, en cualquier caso, depende siempre de la intervención que se tenga que realizar. En Urología tienen asignados dos días a la semana y de esos dos, dependiendo del tipo de operación, pueden acometerse una o dos operaciones.
En Cirugía General pueden tener opción a un día a la semana pero todo depende de los casos que puedan beneficiarse de la cirugía robótica, una decisión que siempre «va a depender de los casos que entren». Por ejemplo, una piedra en el riñón no se beneficia de la cirugía robótica, tampoco extraer una glándula suprarenal «porque es una cirugía que se hace rápido, que tiene poco dolor y la estancia muy corta».
«Una herramienta fantástica»
El jefe del servicio de Urología del Hospital del Bierzo y coordinador del robot en la Gasbi, Óscar Miranda, realiza un balance muy positivo de la implantación de la cirugía robótica en el área de salud.
«Los casos que hemos hecho nos han ido francamente bien y en Cirugía me consta que también, la verdad es que es un gran puntal para el hospital y para el área sanitaria, porque estamos a nivel de hospitales mucho más grandes y más dotados». «Es una herramienta fantástica», concluye.