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El Bierzo
JUICIO POR EL 'CASO CARRASCO'
La acusación rechaza la libertad para Triana y que sólo culpe a Montserrat
Triana solicitó ayuda a Isabel Carrasco para aprobar el examen para un puesto en la Diputación un año después del supuesto acoso sexual
Triana Martínez, Raquel Gago y Montserrat González.
Triana Martínez, Raquel Gago y Montserrat González.
A. Cubillas / @And_Cubillas
26/04/2015
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Siguiendo el guión previsto, la acusación particular en el caso Carrasco ha trasladado a la juez la negativa a la puesta en libertad de Triana Martínez al entender que ha sido la que declaró en el juzgado que fue la encargada de hacer desaparecer el bolso que contenía el arma del crimen que le hizo entrega su madre, Montserrat Gutiérrez.

Según el escrito de la acusación, la letrada Beatriz Llamas recuerda cómo Triana declaró en sede judicial que “no” tupo ningún tipo de relación sexual ni de tipo amoroso con Isabel Carrasco. Sin embargo, en su defensa hace hincapié a que la dirigente política intentó provocar un encuentro sexual con ella y que Triana la rechazó, siendo ése el motivo del origen de la “persecución”, justificando el crimen.

Un ello que, de haber sido así, señala la defensa, lo hubiera conocido su amiga Raquel Gago, la agente de la Policía Local implicada en el caso, y tanto madre como hija lo hubieran afirmado a lo largo de la instrucción del caso. De ahí que para Llamas no sea más otro intento de desprestigiar a la ex presidenta del PP de León.

En cualquier caso, continúa la letrada, carece de sentido que tras ese intentó de mantener relaciones sexuales, Triana enviase un mensaje a Isabel Carrasco solicitándole ayuda para aprobar el examen de la oposición de la Diputación de León. A ello se suma los recortes de prensa que Triana guardaba en su casa. Lo que hace no más que probar, a juicio de la letrada, la obsesión que tenían madre e hija por la dirigente política.

En este sentido, la acusación entiende que la intento de exculpar a Raquel Gago asegurando que dejó “su bolso asegurando que pesaba mucho y que después de comprar fruta lo iba a recoger” es una estrategia para intentar desacreditar el argumento de Fiscalía y acusación que sostienen que el crimen fue un “plan premeditado” entre las tres mujeres.

En su escrito, asimismo, Llamas hace un repaso por el material incautado en la vivienda de Triana, entre lo que destaca la importante munición, fotografías del personal, la calle de la vivienda y de Isabel Carrasco así como las bolsas con marihuana, un arma Royal o el disco duro con la localización de la vivienda de la dirigente política.

Cambio radical en la defensa

De ahí que, la acusación sostenga que el material incautado confirman a Triana como autora de asesinato así como “la persecución y obsesión” hacia Isabel Carrasco, iniciado cuando no encontró su apoyo para alcanzar sus pretensiones laborales y políticas “retroalimentada por Montserrat y comprendida y encubierta por Raquel Gago”.

Por último, la acusación asegura que el “cambio radical” de la versión de la defensa de madre e hija confirma que están intentado atribuir todas las culpas en exclusiva a Montserrat, lo que hubiera sido así, señala la letrada, si hubiera estado sola antes y después del crimen, no hubiera dejado innumerable munición en la vivienda de su hija, no hubiera declarado en dos veces que le entregó el arma para que se “deshiciera de ella” o no le hubiera esperado en el vehículo después de que esta le hubiera entregado el arma a Gago.

Por todo ello, la representación legal de la hija de Isabel Carrasco entiende que Triana Martínez debe continuar en prisión.

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